Ya os he contado que esta venida a Uganda no ha sido fácil. Está siendo
complicada para mi en todos los sentidos, está claro que a África no se la
puede tomar a la ligera y yo lo he hecho. Me sentía tan capaz de TODO que me
olvidé del poder y la fuerza de este continente.
Este continente no perdona, esta tierra necesita gente dura, gente que puede
con todo, por eso los hombres y mujeres que nacen aquí y sobreviven tienen
siempre el peso del dolor en su mirada y aunque nunca te muestren su dolor
abiertamente siempre te dicen, esto es África.
Vivir aquí requiere fuerza, determinación y amor, mucho amor. Vivir aquí
requiere enfrentarse al dolor y aceptar que está ahí y no lo puedes eliminar,
vivir aquí requiere un equilibrio en el corazón que te permita ayudar y
protegerte, vivir aquí requiere aceptar la vida como es.
Estoy días he estado muy muy muy malita, no estaba tan malita desde que era
pequeña, pero nunca he estado tan malita y tan sola. Mientras estaba en esa
habitación de hotel en la que sobre el colchón ponen un plástico para que no lo
manches y las sábanas son tan sintéticas que se te quedan pegadas a la piel
pensaba...yo se que tengo opciones, si realmente estoy que me muero puedo pedir
ayuda, puedo irme a una clínica privada, puedo incluso volar a España de vuelta,
pero, y todas esas personas que cuando están enfermas saben que su familia no
come ese día, que si no trabajan nadie trae dinero a la casa. Todos aquellos
que les preguntas, ¿has tenido malaria? y te dicen "Claro, varias veces al
año desde que era pequeño.." ¡¡¡Varias veces... y yo con una estoy que me
voy a morir!!!
Al final no era malaria, o también era malaria, pero lo principal es que he
tenido Bilharzia. La Bilharzia es una enfermedad que contraes por bañarte en
aguas infectadas con un determinado parásito, estos parásitos se te meten en el
cuerpo y te van destruyendo poco a poco... vamos, asqueroso...
Hoy por primera vez en días me encuentro mejor, casi no tengo fiebre, he
podido desayunar algo, estoy con el ordenador, me he levantado del sofá a prepararme
un té y no he vuelto muriéndome y necesitando una siesta.... hoy estoy
superando la Bilharzia.
Estar enferma en África ha sido diferente, muchos médicos, muchos
diagnósticos, muchos sustos. Como todo aquí estar enfermo es salvaje, no es
cogerte un catarro o una astenia primaveral, no, es tener enfermedades que solo
con el nombre ya te asustan, pero superado esto… se supera cualquier cosa.